La crónica de hoy nos lleva a un lugar bastante cercano pero a la vez desconocido de nuestras Sierras. Se trata del paraje conocido como Cueva Santa.
La formas de llegar son varias, ya sea desde Istán, Monda, Ojén o Marbella. Así que empezaremos a describir el camino en el punto en el que común para todas.
La formas de llegar son varias, ya sea desde Istán, Monda, Ojén o Marbella. Así que empezaremos a describir el camino en el punto en el que común para todas.
El inicio de la pista se encuentra en un lugar bastante frecuentado por los ciclistas. Una vez pasado el Puerto de Ojén, bajado los llanos de Puzla y tomando el desvío de la cantera, como para dar la tradicional "Vuelta a la Sierra", pasamos el puente de Hierro y justo cuando se acaba el asfalto nos encontramos con un cruce de 4 caminos.
Podemos seguir de frente por la pista que nos lleva al cruce de Tolox o a Istán. Podemos subir la carretera de asfalto, que nos lleva al mismo sitio o bien podemos tomar una pista terriza que sube en dirección Sur, que nos llevara al paraje de Cueva Santa.
Tras una rampas bastantes duras y técnica nos encontramos una puerta que normalmente se encuentra abierta.El camino discurre al pie del alto de la Canucha, que le da nombre a la sierra.
En uno recodo del camino, justo cuando el camino cruza el arroyo Canucha nos encontramos con la "Fuente de la Palma", en estas fechas "agostada" pero que en invierno si que tiene agua.
Unos quinientos metros antes de llegar al final de la pista, subiendo a la izquierda, nos encontramos con un montoncito de rocas que nos señalan el corto y empinado sendero que nos conduce a la boca de la Cueva.
Un curioso cartel nos da la bienvenida y nos advierten del tono respetuoso que merece el sitio que estamos visitando.
Como las vacías cuencas de una imponente calavera, que sale del interior de la tierra, nos encontramos con la Cueva Santa.A la entrada nos encontramos con las imagenes y reliquias que los fieles traen a este lugar de reposo, calma y tranquilidad.
Tras la entrada nos internamos en una gran gruta, que con su frescor nos resguarda del inclemente sol del verano.
Al frente nos encontramos con la zona del Puerto y sus castaños, en segundo término con las temidas antenas de la Alpujata
Los temidos por mas de uno "Llanos de Puzla" que nos llevan al Puerto de Ojén y a la Costa.
Tras la visita, volvemos a la pista y a seguir subiendo, solo faltan unos 500 metros para llegar al final, por lo que es un camino de ida y vuelta. A no ser que lo uses para llegar a la vecina Juanar.
Una vez arriba se pueden disfrutar de una vistas de la zona:
Los temidos por mas de uno "Llanos de Puzla" que nos llevan al Puerto de Ojén y a la Costa.
1 comentario:
¿Qué le pasó ese día a tu cuenta Kms ???
Excelente trabajo, LLanero
Para cuando nos llevas a rezar un Padre nuestro y 2 Ave Marías...
Y a ver quien tiene lo que hay que tener para verte en la verea...jajaja
JC
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